El insomnio es un fugitivo. Un ejército de capsulitas bicolores trata de someterlo al injusto dominio del sueño y él huye a través de los ojos entrecerrados del insomne.
"Puedo escribir los versos más tristes esta noche...".
El amor, el desamor, el estrés, el repaso de lo que fue y de lo que pudo ser, la anticipación negativa, el texto hasta entonces esquivo, la más profunda, inútil y silenciosa conversación,... Todo encuentra cobijo en el manto acogedor del insomnio.
- "No duermo". "Apenas duermo". "Me desvelo y ya no puedo volver a conciliar el sueño". "No me repara el cansancio, es un sueño ligero". "Lucho, lo intento todo, pero no duermo"
El insomnio es un fiel compañero de muchos trastornos. Tiene identidad propia y aún así, no tiene reparos en dejarse ver con otros, en un segundo falso plano. Los tests que exploran ansiedad, depresión, etc., siempre reservan uno o varios ítems a este aspecto. Si ponemos una crucecita ahí, mal asunto, el resto de síntomas cobrarán otra dimensíon.
El sueño es un gato. Lo llamamos y no viene. Obstinados, le hacemos gestos que ya debiera entender. Ronronea en la distancia, haciendo eses en un ritual de acercamiento, hasta que, ya en nuestro regazo, se arremolina confiado. Bastará, no obstante, una sombra, una duda, una simple amenaza de movimiento, para que salte de nuevo a la distancia, sin poder ya acariciar su lomo erizado.
Lo que los psicólogos llamamos "Higiene del sueño" tiene menos de policía de la Gestapo que las pastillitas citadas. Permite tratar al insomnio con cierta camaradería, aprovechar el resquicio de tiempo gratis, dejarse vencer por el balanceo del abandono. Es una especie de manual de rendición. Y en esa extraña carretera secundaria aparece de nuevo el felino para arrastrarte, ahora que ya has encontrado otra causa más noble, y tú vas, vencido al fin.
"...oír la noche inmensa, más inmensa sin ella..."
Aquel que un día fui
Hace 9 años
3 comentarios:
Hola, Walden. Si el insomnio me sirviera para escribir esas cosas yo lo firmaba ahora mismo.
Muy bonito poema.
Fran.
Me gustaría saber cómo vencer el insomnio. Estoy harto de pastillas de esas que dices, aunque no son bicolores, pero duermo poco y ademas siempre estoy pensando en que a la noche siguiente tampoco voy a descansar.
Gracias. Carlos.
Hola, Fran y Carlos. Respecto a lo que dices, Carlos, podrías probar a ir a una consulta de psicología y analizar las causas, de esa manera es más fácil ajustar el tratamiento. A veces, hasta que no solucionamos algo que tenemos pendiente no podemos descansar adecuadamente, otras, el estrés te hace tener una sensación de sueño ligero y poco reparador, también ciertos fármacos o enfermedades pueden interferir con el sueño. Si llevas mucho tiempo así, tomando "pastillitas", deberías intentar averiguar qué ocurre. Los hipnóticos no son malos en sí mismos, pero no son la solución permanente para la mayor parte de los problemas de insomnio.
Un saludo a los dos.
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